La redundante situación, donde sitúan al ser humano en infante es absurda si se ve desde el punto de vista, donde quien "juzga" es enteramente alguien inmaduro, ¿irónico no?, aunque en estos días quien no lo es, si solo vemos que en el entorno los mediocres exigen mediocridad inconforme, los caídos niegan, los altos dicen ser humildes y sin embargo ese pequeño comportamiento es el que los hace grandes, y los que no piden más son conformes pero se llaman así mismos NO EXIGENTES... volviendo a la cadena, anodino.En fin, el infante o infantil es el único dentro de este ciclo donde no debería ser tan juzgado, pues tiene una simplicidad que concibe a la satisfacción y lucha por convicciones de una manera tan natural que no entra en ningún rango, donde tenga que ser etiquetado tan determinantemente, como las posiciones anteriores. Pues al "niño" le nace, desea el progreso, el crecimiento, el aprender, esa ansiedad por crecer y ser alguien importante, esa manera de luchar sin necesidad de voltear a juzgar a los demás.
Entonces digome infantil, más nunca inmadura.
Diferencía entre acoso y duda.
Sofía
